La clasificación de los planetas del Sistema Solar ha cambiado, a los escolares que se les enseña en el colegio de carrerilla la lista de los clásicos Mercurio, Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón, van a tener que eliminar a Plutón de la lista porque desde el 24 de agosto de este mismo año, la Unión Astronómica Internacional (IAU) en su XXVI asamblea en Praga dejó de considerar a Plutón como un planeta.
Plutón, que hasta ahora señala los límites del sistema solar, posee una estructura desconocida y sigue una órbita que se diferencia claramente de los demás planetas. No ocupa el lugar que le correspondería aparentemente, por lo que se cree que no es un verdadero planeta sino un antiguo satélite de Neptuno. Según Junachi Watanabe, portavoz del observatorio nacional de astronomía de Japón y miembro del Comité de la Unión Astronómica Internacional (IAU) para la Definición de un Planeta, anunció que “el Sistema Solar tendrá ocho planetas y al menos dos planetas enanos (Plutón y Xena)".
Orígenes de los planetas
Las teorías sobre el origen del Sistema Solar son diversas, algunos afirman que forman una familia común que se originó al mismo tiempo; otros como Kant y Simon de Laplace, sostienen que una nube de gas se fragmentó en anillos que se condensaron formando los planetas; otros científicos consideran algunas hipótesis de catástrofes como la de un encuentro violento entre el Sol y otra estrella. Las teorías actuales conectan la formación del Sistema Solar con la formación del Sol, ocurrida hace 4700 millones de años.
El Sistema Solar está formado por el Sol, los planetas y sus satélites, asteroides, cometas y meteoroides, y polvo y gas interplanetario. Los planetas se dividen en dos grupos, por un lado, los planetas exteriores (Mercurio, Venus, Tierra y Marte) y por otro, los planetas exteriores (Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón). Los interiores son pequeños y se componen sobre todo de roca y hierro, en cambio, los exteriores, a excepción de Plutón, de ahí una de sus rarezas, son mayores y se componen, principalmente, de hidrógeno, hielo y helio.
A diferencia de una estrella, un planeta no emite radiación propia y únicamente brilla porque refleja la luz que recibe de otro astro. Los planetas telúricos (Mercurio, Venus, la Tierra y Marte) tienen unas dimensiones medias de entre 5000 a 13000km de diámetro, con una densidad bastante elevada; los otros planetas, los gigantes, mil veces más luminosos y con una densidad cinco veces menor, cercana a la del agua. Esta diferencia se debe principalmente al hecho de que los planetas gigantes están constituidos por elementos ligeros, hidrógeno y helio; en consecuencia, es de suponer que carecen de superficie rocosa, sólida, a diferencia de los planetas del primer grupo, formados por un núcleo metálico, rodeado de un manto y de una corteza de silicatos.
Plutón parece similar a los satélites más grandes y helados de Júpiter y Saturno, pero está tan lejos del Sol y es tan frío que el metano se hiela en su superficie, de ahí que por su rareza pase a ser considerado un planeta enano. Otra de las rarezas de Plutón tiene que ver con su órbita, todo el Sistema Solar es bastante plano, pero las órbitas de Plutón son inclinadas, es tan elíptica que hay momentos que se acerca más al Sol que Neptuno
Descubrimiento de Plutón
Su descubrimiento se debe al astrónomo estadounidense William Tombaugh, fue hallado el 18 de febrero de 1930 desde el observatorio de Arizona, considerado desde entonces como el noveno planeta, siempre llevó consigo la polémica entre astrónomos quienes dudaban de su pertenencia al grupo de planetas de Sistema Solar. Tras muchos debates, la IAU considera a Plutón como un planeta enano. Las razones aludidas, su órbita tan alejada del plano orbital del resto de los planetas, su gran distancia al Sol y a la Tierra, unido a su reducido tamaño.
Nuevos planetas
Al mismo tiempo que la IAU excluyó a Plutón de pleno derecho del Sistema Solar en su reunión de Praga, también se decidió que el número de planetas no se aumentará de 9 a 12, sino todo lo contrario, se reducirá de 9 a 8. El pasado 16 de agosto se planteó aumentar el número de planetas, se añadirían Ceres, Caronte y Xena, pero finalmente, semanas después, el 24 de agosto, la IAU decidió que el número de planetas no se aumentaría.
El descubrimiento en el año 2003 del objeto celeste más lejano del Sistema Solar, también conocido como Xena, avivó la polémica sobre qué tamaño debía tener un planeta. La cuestión parecía peliaguda: si se decidía incluir a Xena entre los planetas del Sistema Solar, también deberían incluirse otros 52 cuerpos celestes, como el asteroide Ceres o Caronte, el satélite más grande de Plutón. Si, por el contrario, se decidía excluir a Xena del conjunto de planetas, muchos astrónomos creían que entonces el diminuto Plutón tampoco debería ser considerado como tal. La solución adoptada fue esta última, desde ahora, en los libros de texto, enciclopedias y demás libros referentes al tema, deberán indicar que el Sistema Solar lo componen 8 planetas puesto que Plutón ha dejado de considerarse como tal, y ha pasado a ser considerado como un planeta enano.
El investigador adscrito al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), José Luis Ortiz, señaló que “los planetas enanos serían tres por el momento, Plutón, Ceres y Xena, ya que se iría ampliando la lista conforme la investigación sacase a la luz más objetos del Sistema Solar que respondan a estas características”.
26 noviembre 2006
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5 comentarios:
hola Juan:
Mi enhorabuena por este blog. Hablas de cosas muy interesantes y de una forma batante clara y directa, como un buen periodista. Explicando los hechos como son, xo sin emitir juicio alguno sobre ellos. Espero volver a leerte pronto. Un abrazo
mi tarea sobre esto es re aburriada ni ganas de trabajar. que aburrido!!!!!!!!!!
interesante pero me aburro
pero en que añodeja de ser planeta?
interesante muy
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